De callejones oscuros

 

Estamos llorando sobre la vida que no elegimos, vamos avanzando por un camino que nos empuja hacia abajo y me agarras la mano tan fuerte que el dolor me hace querer soltarte, pero sigo buscándote y queriendo encontrarte.

Nací siendo poesía, pero me quieres mercenario de una economía que no he elegido pero que me hace pobre si no trabajo. Y es en uno de esos momentos que llaman ellos oportunidad donde la ansiedad se posa para estallar en un grito desgarrador del alma que por dentro llora y por fuera hace temblar la sala.

No entiendo a qué hemos venido, pero te confieso que en silencio es la poesía que salva esta vida que encuentra encanto en los callejones más oscuros de un París que no ha sido lo que me contaron aquellos que vieron en la aventura y no en el amor el salvavidas de un alma pérdida.

Por siempre poesía.

Es poesía

 

Cuando la inspiración llega,
es poesía
que viene vestida
de tristeza y un poco de melancolía.

Es poesía cuando en puntillas
me subo al desván
a mirar de reojo pasar la vida
y es el momento que toma la herida
para correr la escalera y dejarme ahí metida.

Es poesía cuando; en secreto,
llenos de gente,
nos hemos mirado
Como nunca, en silencio y hasta siempre…

Es poesía cuando
Con la luz entrando por la ventana
Me has dicho;
¿Nos queda tiempo todavía?

No sé ni siquiera
¿Qué es poesía?
Solo espero siempre que;
tu mirada y tu risa tengan muchos versos todavía.

Y entonces

Y entonces han pasado los años,
Y tu mano y mi mano ya no encajarían
Pero nuestros ojos saben;
Hemos sido nuestros una porción de esta vida.

Y entonces lo que conocíamos
ya nos parece extraño
y miramos al redor buscándonos
pero nada queda para encontrarnos.

Somos parte de una historia del pasado,
Somos el nudo en la garganta,
Y un secreto…
Que guardamos con la mirada.

Y mientras pasas junto a mí,
Yo me acuerdo de lo que fuimos,
Lo que tuvimos,
Lo que nos separó.

Se chocan nuestros hombros
Se electriza la respiración
Hasta nunca, hasta siempre
Adiós, pasado amor.